Por Julio Molisano|RDN| A rigor de la realidad que muestra la gestión del libertario Leandro Zdero no se puede negar que su campaña prometiendo un
en solo cuatro meses, la inseguridad se profundiza y la salud pública no tiene ni siquiera un plan de acción, el esquema de suspensión abrupta de la obra pública dejó miles de trabajadores fuera del sistema y la precariedad social dejó sin recursos a los sectores medios que aportaban con la changa a los trabajadores informales que dejaron de tener esa entrada y hoy están condenados a depender solo de los comedores y merenderos para ingerir alguna comida que a pesar de la crisis continúan funcionando con muchas dificultades por la discriminación política en la provisión de alimentos por parte del gobierno provincial, no solo se trata de la mercadería sino que la discriminación también comprende la caída de los planes con que las trabajadoras y trabajadores organizaban, cocinaban y atendían a niños y grandes con la comida y la merienda varias veces a la semana, hoy ese privilegio solo gozan los punteros del gobernador. Estamos transitando un proceso que pega fuerte en los sectores más vulnerables de la comunidad, realidad que nadie puede negar, podes recorrer los barrios de la periferia de Resistencia y constatar el estado de precariedad social que vive la comunidad, frenaron un proceso de desarrollo para reemplazarlo por esto que solo beneficia a la camarilla del gobierno, acordemos también que Capitanich no tiene diputados, ni militantes que salgan a contrarrestar la feroz campaña de demonización que lleva adelante el oficialismo sobre su persona, la utilización política del lamentable “caso Cecilia” promovida desde los medios de comunicación que nacionalizaron la desaparición de una persona convirtiendo el hecho en un femicidio sin pruebas concluyentes horrorizo a toda la comunidad, me incluyo, que concurrió a las urnas a votar en contra de la “impunidad” que instaló Gloria Romero en la persona de Capitanich y que posibilitó que su candidato, Leandro Zdero, hoy sea el gobernador del Chaco, la operación psicológica se desgrana dia a día, con Zdero gobernador ya no hay marchas ni reclamos por la aparición de Cecilia, nadie se acuerda de ella, ni Gustavo Martínez ni Elida Cuesta, ni las feministas, ni los referentes de los Derechos humanos, ya se terminaron las elecciones, el caso Cecilia ya no concita rédito político y van a tener que enfrentar el juicio sin pruebas y como en el derecho penal no hay lagunas la duda beneficia al reo, el sostenimiento de la prisión preventiva se queda sin sustento legal y el desenlace tendría un final anunciado, in dubio pro reo, expresión latina, principio jurídico que implica que, en caso de duda y ante la insuficiencia de pruebas, se favorecerá al acusado de la comisión de un delito. Está basado en el principio de presunción de inocencia. Mientras esto se desarrolla Zdero habría gastado más del 50% del presupuesto anual del Poder Ejecutivo sin construir un metro de vereda. Fue todo una mentira.