“Hace solo dos meses que abrimos, esta es la primera vez que nos roban. Yo compré este bar en 2019, pasó la pandemia y recién después pude empezar a reacondicionarlo. Todo:
habilitación, medidor de gas, cosas que llevan un montón de tiempo. La Legislatura Porteña está analizando calificarlo como lugar de interés cultural. Hace 20 años que tengo negocios, y me pasó millones de veces esto. En locales abiertos, en locales cerrados, de todas las maneras. Acá estamos, qué le vamos a hacer”, expresa Lucas, que sigue atendiendo este domingo pese a lo ocurrido.