Un nuevo ataque en Rosario incluyó una amenaza a la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich; al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro; y al ministro de Seguridad de
la provincia, Pablo Coccocioni. En esta oportunidad, en las inmediaciones de un jardín de infantes en la zona oeste de la ciudad aparecieron al menos cinco autos incendiados. En la puerta de la institución educativa, además, se encontró una nota.
"Bullrich, Pullaro y Coccocionihaganse cargo de este quilombo y de las muertes que va a haber. Queremos nuestros derechos. atte: los rosarinos”, decía el papel escrito a mano. Apenas encontraron el escrito a primera horas del viernes 3, las autoridades del jardín “Los Zorzales”, ubicado en White 7648, suspendieron las clases.
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Unas horas antes, en esa misma cuadra, fueron incendiados al menos cinco vehículos que estaban estacionados. Los autores dejaron allí un escrito similar, en el que también apuntaron contra Bullrich, Pullaro y Coccocioni. “Siempre los autos duermen afuera, nunca pasó nada acá. La nota la dejaron pegada en la zona de los departamentos del complejo Fonavi", comentó uno de los vecinos en diálogo con el programa local De 12 a 14.
El dueño de uno de los vehículos afectados aseguró que la Policía se acercó al lugar "pero no hizo nada". "Ni siquiera encontraron la nota, la encontramos nosotros. Esto fue a la 1, a la 1.30. Por lo que se ve, tiraron nafta abajo de los vehículos, buscaban que exploten. Entre los vecinos fuimos apagando el fuego hasta que llegaron los Bomberos Zapadores. Algunos de los vehículos tienen destrucción total”, agregó el hombre.
Ataques en Rosario: el asesinato de Bruno Bussanich
Las dos nuevas intimidaciones sucedieron a la vuelta de la estación de servicio Puma donde el pasado 10 de marzo fue asesinado el joven Bruno Bussanich, el playeron que se encontraba trabajando cuando un menor de edad le disparó. Durante esos días otros dos trabajadores resultaron víctimas fatales en episodios con características similares.
Hasta el momento, la Justicia imputó a cinco personas por el crimen de Bussanich. La Justicia cree que los crímenes fueron ordenados desde la cárcel de Piñero como represalia por el endurecimiento de las medidas penitenciarias.
El menor de edad que fue identificado como el posible autor del asesinato del joven playero declaró ante el fiscal Adrián Spelta. Según trascendió, el sospechoso ya había cometido dos homicidios por encargo antes de ser detenido.
