Las operaciones impagas fueron la compra de gas a las petroleras -YPF, PAE, Total Austral, Pampa Energía y Tecpetrol, principalmente- para la generación eléctrica, que tiene contratos mediante el Plan Gas,
y la compra misma de la energía producida por empresas como Central Puerto, Pampa Energía, YPF Luz, AES, Enel, Albanesi, MSU, Genneia, las hidroeléctricas binacionales y las centrales nucleares, entre otras.