LOS VIDEOS Y LAS IMÁGENES DEL EX VICEPRESIDENTE AMADO BOUDOU COMO LAS DEL EX MINISTRO DE PLANIFICACIÓN, JULIO DE VIDO, TOMADAS DE LAS DETENCIONES POR PERSONAL DE LA GENDARMERÍA DE LA NACIÓN COMO POR PREFECTOS NAVALES HABRÍAN SIDO REALIZADAS CON EL AVAL DE LA MINISTRA DE SEGURIDAD, PATRICIA BULLRICH.

En el caso de las fotos de Julio De Vido, esposado en el edificio de los tribunales de Comodoro Py, habría sido el chofer de uno de los jueces que emitieron la toma que se divulgó por los medios de comunicación. Luego trascendieron imágenes propias del expediente que se pone en marcha cuando una persona ingresa al Servicio Penitenciario.

De Vido se entregó en los tribunales de Comodoro Py el 25 de Octubre de este año pero en una carta que escribió desde el penal explicó que los oficiales de Gendarmería habían acudido a su domicilio a detenerlo aún antes de que estuviera la orden judicial, es decir cuando aún tenía fueros de diputado nacional.

En el caso de Amado Boudou, detenido el viernes 3 de noviembre a las 7 de la mañana, la cuestión fue menos cuidada. Se divulgaron por los medios de comunicación y en las redes sociales, videos en los que se podía ver a un oficial del juzgado y personal de Prefectura Naval, Gendarmería y la policía federal que detuvieron al ex funcionario y le leyeron los cargos. Se pudo a ver a Boudou en estado de “shock”, temblando y sorprendido por la medida en un acto que debió ser íntimo y resguardado por los mismos que lo estaban esposando.

Patricia Bullrich sería la responsable y la que habría dado el guiño para que los videos se grabaran y sacaran las fotos de la detención de Boudou y De Vido. La ministra cuenta con el respaldo de abogados y jueces vinculados al señalado como operador de Mauricio Macri, Daniel “en tano” Angelici.

La decisión fue severamente cuestionada por los más diversos sectores políticos, periodísticos, académicos y referentes del derecho constitucional que coincidieron en que “Justicia no es Venganza” y que en ambos casos de trató de un acto de “humillación” innecesario.

A tal punto llegó el disgusto que el presidente Mauricio Macri pidió explicaciones a Marcos Peña, jefe de Gabinete, para que averiguara quien dio la orden de divulgar esas imágenes y solicitó un sumario interno en las fuerzas de seguridad. Peña habló con Germán Garavano, ministro de Justicia para que averiguara si el juzgado de Ariel Lijo –a cargo de la detención del ex vicepresidente Amado Boudou- o bien, Luis Rodríguez- quien ordenó la prisión del ex ministro de Planificación, Julio De Vido.

Fuentes cercanas a ambos jueces coincidieron en que en los operativos se pudo ver a personal de fotografía de Gendarmería con cámaras especializadas y zooms específicos para hacer tomas a largas distancias. “Era una cacería de imágenes”, explicaron empleados de los tribunales.

Consultados los voceros del Ministerio de Seguridad niegan la responsabilidad o que Bullrich haya dado la orden de difamar a los detenidos.

Eduardo Durañona denunció a la Prefectura Naval Argentina por la detención supuestamente ilegal de los oficiales que intervinieron en la detención de su cliente, Amado Boudou. Sin embargo hay otra denuncia penal contra la ministra Patricia Bullrich.

La situación ya genera internas en el Gobierno de Mauricio Macri porque el presidente asumió las mayores críticas. Mientras tanto, los jueces federales omiten responsabilidades y Bullrich supera los obstáculos políticos como si nada hubiera pasado, insisten voces judiciales.